Los diputados del Partido Acción Nacional (PAN), Federico Döring y Ernesto Sánchez, calificaron como un “chivo expiatorio” al alcalde de Teuchitlán, Jalisco, José Asunción Murguía, tras su detención por presuntos vínculos con delincuencia organizada y omisión de funciones en relación con el caso del rancho Izaguirre, sitio señalado como un campo de reclutamiento y entrenamiento del crimen organizado y supuesto centro clandestino de exterminio. Los legisladores panistas denunciaron un presunto pacto de impunidad entre el gobierno federal y el estatal, acusando directamente a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y al gobernador jalisciense Pablo Lemus: “Decirnos que solo dos policías municipales y un alcalde explican el funcionamiento de un centro de exterminio es insultar nuestra inteligencia”, expresó el diputado Döring, quien comparó esta versión con la tragedia de Ayotzinapa, armando que pretender resolver el caso culpando solo a Murguía recuerda la narrativa de que los Abarca actuaron solos, sin participación de otras autoridades.
El panista también demandó que la Guardia Nacional rinda cuentas por los funcionarios que habrían permitido durante años la operación ilegal del rancho, y exigió que se investigue a fondo a las autoridades locales
involucradas, incluyendo a la Fiscalía estatal, la Comisión de Búsqueda de Jalisco y la Secretaría General de Gobierno.
