Luego de 10 días de paro debido a millonarias extorsiones del crimen organizado, productores de limón, empacadores e industriales reanudaron la actividad citrícola en los municipios de Apatzingán y Buenavista bajo un intenso despliegue de fuerzas federales y estatales.
A pesar de que la intención de los integrantes del sector limonero era reiniciar el pasado lunes, la incertidumbre impidió que el grueso de empresarios lo hiciera.
Este miércoles, desde las 4 de la mañana, las cuadrillas de cortadores se concentraron en las inmediaciones del monumento a Lázaro Cárdenas, de donde fueron trasladados a las huertas.
Los centros de acopio, los empaques y las industrias también trabajaron con normalidad. Los comercios y pequeños negocios que dependen de la actividad citrícola de manera indirecta también regresaron a sus actividades.
En el Tianguis Limonero, así como en las calles y campos agrícolas, fue evidente el despliegue, principalmente de personal del Ejército.