El Partido de la Revolución Democrática (PRD) sobrevivirá ante su inminente pérdida de registro a nivel nacional ya que en 12 de las 32 entidades del país conservará su registro al tener legisladores locales y encabezar municipios.
En Aguascalientes, Baja California Sur, Michoacán, Estado de México, Oaxaca, Tabasco, Tlaxcala, Zacatecas, Sonora, Guerrero y San Luis Potosí mantendrá su registro, por lo que sólo podrá participar en las elecciones a gobernadores, diputados y presidentes municipales.
En la Ciudad de México, que gobernó desde 1997 al 2018, rebasó el 3 por ciento de la votación en las elecciones de diputados locales y alcaldías, pero también quedará como partido local.
Resultado de la elección del 2 de junio, en el Estado de México obtuvo un total de 344 mil 294 votos de los 8 millones 395 mil 186 sufragios emitidos en la entidad, lo que representa el 4.1 por ciento del total.
Esto quiere decir que superó el 3 por ciento mínimo que marca la ley electoral y además tuvo un ligero incremento en comparación con la elección de 2023, por lo que se espera que el año entrante incrementen sus prerrogativa.
En Guerrero, desde septiembre de 2015, su sede, ubicada en Chilpancingo, fue vandalizada tras la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, por lo que trabajan en una sede alterna y su sede municipal en Acapulco quedó con severos daños tras el paso del huracán Otis.
El último dirigente municipal de Acapulco fue Bulmaro Cabrera, quien en la pasada contienda electoral abandonó al partido y se fue a Movimiento Ciudadano.
El partido quedará como local en Aguascalientes, así lo informó el dirigente estatal, Iván Sanchez Najera.
En entidades donde ya perdió el registro sus instalaciones se encuentran vacías, como en Sinaloa. Sus pasillos antes vibrantes de actividad política hoy están sumidos en un silencio desolador.