El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que “la marcha por la democracia” es como el mundo al revés, porque sus adversarios lo tachan de dictador, autoritario y vinculado al narcotráfico, pero cuando ellos detentaban el poder había un “Narco-Estado”.
En la conferencia realizada esta mañana en Puebla, López Obrador expuso que quienes ayer se manifestaron en más de 100 ciudades del país quieren hacer una democracia sin el pueblo, y solo quieren que gobierne lo que denominó una oligarquía corrupta.
El jefe del Ejecutivo federal indicó que en su gobierno se ha combatido la corrupción, se ha mejorado la economía y se ha reducido la pobreza, entre otros avances y antes estaban al servicio de una mafia, lo que les genera molestia y manifestaciones como las de este domingo donde se estiman la participación de más de 700 mil personas, mientras que la información oficial revela que fueron 90 mil