• Curiosa y casi irrisoria la cadena de ataques al Gobierno Federal por el huracán Otis en Guerrerro cuando su gobierno ocupa los últimos lugares en materia de protección civil, señala
• Destina menos de 5 pesos por habitante mientras Chiapas, el estado más pobre del país, invierte 105 pesos
• De acuerdo con el Inegi, Chihuahua carece de un plan o programa de protección civil y no cuentan con un plan de emergencia o contingencia como lo marca la ley
• Cuenta con 1.3 personas por cada 100 mil habitantes y apenas 3.1% son bomberos, 10.9% paramédicos y no cuenta con personal de búsqueda y rescate en estructuras colapsadas
La sociedad chihuahuense se encuentra totalmente desamparada en materia de Protección Civil, tal y como lo revela el Censo Nacional de Gobiernos Estatales 2022 y 2023 en donde Chihuahua ocupa los últimos lugares en todos los rubros, señaló el delegado estatal de los Programas para el Desarrollo, Juan Carlos Loera de la Rosa.
El pasado 19 de septiembre, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) presentó información sobre este censo que se realizó con el fin de conocer los recursos humanos y presupuestales con que cuentan las unidades de protección civil en los estados de la República.
El estudio reveló que las unidades de protección civil de Chihuahua, Baja California, Aguascalientes, Baja California Sur, Sonora, Puebla, Durango e Hidalgo ejercieron menos de cinco pesos por habitante cada una.
Mientras que la unidad que ejerció el mayor monto per cápita con 105 pesos fue Chiapas, el estado más pobre del país y cruce de migrantes, seguido de Campeche que erogó 83 pesos por habitante.
Durante 2022, las unidades estatales de protección civil ejercieron 2 mil 188 millones 322 mil 639 pesos, lo que equivale a un promedio de 17.5 pesos por habitante a nivel nacional, lo que nos ubica muy debajo de la media nacional.
Además, tal y como lo establece la Ley General de Protección Civil, el estado debe contar con diferentes instrumentos para la organización y planeación de tareas de protección civil.
Entre dichos instrumentos se encuentra el Plan o Programa de Protección Civil que establece los objetivos, políticas, líneas de acción y demás recursos necesarios para la atención en casos de desastres o emergencia.
Otro de los instrumentos es el Plan de Emergencia o Contingencia que tiene como objetivo organizar las acciones, servicios y recursos materiales y humanos para la protección de la comunidad frente a riesgos de desastre.
El otro instrumento es el Atlas de Riesgos que es el sistema que analiza el peligro y vulnerabilidad en la que se encuentra la población ante posibles escenarios de desastres.
De los tres instrumentos, Chihuahua únicamente cuenta con el Atlas de Riesgo y está en proceso de integrar tanto el Plan o programa de Protección Civil como el de Emergencia o Contingencia.
El estudio reveló que Chihuahua cuenta con 1.3 funcionarios por cada 100 mil habitantes lo que lo ubica por debajo de la media que es de tres funcionarios estatales por cada 100 mil habitantes, pero entidades como Guerrero, Nayarit, Campeche y Tabasco cuentan con 10 personas por cada 100 mil habitantes.
Asimismo, en cuanto a las funciones de dicho personal se encontró que el 3.1 por ciento es personal de Bomberos, el 10.9, Servicio Paramédico, 75 por ciento realiza funciones administrativas y de apoyo, el 10.9 por ciento realiza alguna otra acción y no se cuenta con personal de Búsqueda y Rescate en Estructuras Colapsadas.
Ante este panorama podemos visualizar cómo al Gobierno del Estado no le importa la Protección Civil y que la mayor parte de estas acciones, como revela este estudio, se realiza por personal voluntario como es el caso del combate de incendios forestales, señaló Loera de la Rosa.
No obstante, como es bien sabido tan sólo el último año se contó con inundaciones en diversas partes de la entidad y precisamente por que las contingencias no pueden predecirse es necesario contar medidas de protección civil como lo marca la ley.
Destacó que ante estos hechos, resulta curiosa y casi irrisoria la cadena de ataques que a forma de carrusel opera la gobernadora de Chihuahua, utilizando a aliados del prianismo y a sus propios funcionarios de gobierno para denostar el trabajo que realiza el Gobierno Federal ante la lamentable situación que viven nuestras hermanas y hermanos por el huracán Otis que arrasó el puerto de Acapulco en el estado de Guerrero.
