Elementos de la Fiscalía General de Justicia del Estado y de la Comisión Interinstitucional donde particin instituciones de los gobiernos federal y de Nuevo León, realizaron un nuevo cateo e inspección en el Motel Nueva Castilla, lugar donde fue encontrado el cuerpo de la joven Debanhi Susana Escobar Bazaldúa.
Mario Escobar, padre de la joven desaparecida el pasado 9 de abril y localizada sin vida el 22 del mismo mes, señaló que la diligencia es con el fin de buscar nuevos indicios y tratar de corroborar información de personas que le han dicho, de manera anónima, que ellos estuvieron ahí y saben lo que le pasó a su hija.
Entrevistado momentos antes del inicio del cateo, Mario comentó que han transcurrido más de dos meses desde que fue hallado el cuerpo de su hija, y todavía continúa en la búsqueda de la verdad.
Recalcó que en los últimos días le ha llegado información a través de mensajería de redes sociales, de mucha gente que dice tener información porque estuvo ahí en el motel y sabe lo que le pasó a Debanhi, pero temen hablar porque están amenazados.
Los llamó a no tener miedo y que se acerquen a la Fiscalía, incluso como testigos protegidos, para que aporten lo que saben, a fin de que no se vuelva a repetir lo que pasó a su hija, y nadie más esté en su lugar: “Ayúdenme a cambiar Nuevo León y a México”, dijo Escobar Salazar.
Explicó que el cateo e inspección que inició alrededor de las 17 horas de ayer, sería para buscar indicios y realizar estudios que no se habían hecho, tanto en las habitaciones como en las cisternas.
El papá de Debanhi dijo que existe la posibilidad de que el viernes 1 de julio se realice la exhumación; lamentó no poder comentar más sobre el motivo del cateo, porque debe mantener la secrecía en vísperas de la exhumación de los restos de su hija.
“Vamos a checar, ver qué pasó, pero yo me mantengo firme en que fue asesinada, golpeada, y determinarán los peritos si hubo algo más”, dijo finalmente Mario Escobar.
