a Santa Sede ha confirmado en un breve mensaje que el Papa Francisco padece una infección en las vías respiratorias y «leve fiebre». El diagnóstico llega tan solo unas horas después de que, en un escueto mensaje, el Vaticano comunicar que el Pontífice había sido ingresado en el Policlinico Gemelli de Roma para realizarse unas pruebas necesarias y continuar el tratamiento de la bronquitis que padece desde hace 25 días.
Esta enfermedad le ha impedido hablar en sus últimas apariciones públicas y por ello ha tenido que delegar la lectura de sus homilías y discursos en terceros estas últimas semanas. «Espero poder hacerlo la próxima vez», apenas pudo decir el Pontífice en su brevísima intervención en la audiencia del pasado miércoles y, aunque con dificultades, aprovechó la ocasión para hacer una exhortación urgente a rezar por la paz, demostrando sus prioridades incluso en momentos de debilidad.
Toda la agenda de Francisco ha sido anulada tras ser hospitalizado. El Papa no participará finalmente en la audiencia del jubileo de los artistas prevista para este sábado 15 de febrero ni tampoco presidirá la misa del domingo. El Pontífice tampoco podrá visitar el lunes 17 de febrero los míticos estudios cinematográficos romanos de Cinecittà «por su imposibilidad de participar».Desde principios de febrero el Papa ha explicado que sufría un «fuerte resfriado», como él mismo dijo en la audiencia general del miércoles 5 de febrero y en los días sucesivos mantuvo sus audiencias pero en su residencia, la Casa Santa Marta, para no trasladarse al palacio pontificio «debido a una bronquitis», según informó la Santa Sede.