La candidata presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez, descartó tener algún grupo de abogados preparando la anulación del proceso electoral, en caso de perder los comicios del 2 de junio.
Al participar en Tercer Grado, rechazó tener un plan B, porque tiene firme su objetivo de ganar la elección, misma que dijo, tiene que ser ganada por mínimo cinco puntos para que el presidente Andrés Manuel López Obrador reconozca su triunfo.
—Si tú ganas por más de cinco puntos, es decir, que ya no hay el margen de la impugnación legal, ¿consideras que el Presidente reconocería esa victoria?
“Sí, sí la va a reconocer”, apuntó.
—En el caso de una derrota, ¿presentarían una impugnación, una petición de anulación de la elección presidencial por las intromisiones?
“No hay plan B, voy a ganar”, insistió.
La abanderada del PAN, PRI y PRD se manifestó porque el próximo 2 de junio haya una gran participación ciudadana, en la que el electorado elija entre alguna de las dos alternativas que existen en la boleta electoral.
Sobre la insistencia de los dirigentes del PAN, Marko Cortés y del PRI, Alejandro Moreno, para que el aspirante de Movimiento Ciudadano, Jorge Álvarez Máynez, decline a su favor, Gálvez rechazó sumarse esos llamados porque tiene claro que su rival es la candidata de Morena, Claudia Sheinbaum.
Afirmó que respeta a la militancia emecista, de los cuales, incluso señaló, muchos votarán por ella.
“No la pido, yo no le he pedido, yo medí claramente el papel que juega Jorge en los debates, o sea, la manera que se dirige a mí, la manera que se dirige a Claudia, la manera como salió en el primer debate a meterse cuando yo podía tener una confrontación con ella. Pero bueno, más allá de eso, es claro que ese papel es el que iba a jugar. Pero mi tiro es con Claudia”, indicó.
Respondió que si el gobierno federal deja de invertir en proyectos faraónicos y distribuye bien el presupuesto se puede bajar la pensión de 65 a 60 años, sin afectar las finanzas nacionales.
Sobre los casos de corrupción, indicó que buscaría que la Fiscalía General de la República investigue el gobierno de la 4T, al tiempo que descartó un borrón y cuenta nueva como el que se dio en la presente administración.
“Tenemos que exigirle a la Fiscalía. Y ahí sí, si me toca nombrar al fiscal, voy a impulsar de entrada a la Fiscalía Anticorrupción para que se ponga a chambear. Al auditor Superior de la Federación, que se pongan a chambear, que investiguen y que se sancione la corrupción. Yo no creo en el borrón y cuenta nueva, porque no me toca a mí dar el borrón y cuenta nueva. Pero sí darle seguimiento a las denuncias que se hayan presentado”, detalló.
Al responder sobre los perfiles que estarían en su gabinete, indicó que Raquel Buenrostro se mantendría al frente del SAT y, sin decir en qué puesto, mencionó a Hanna Palacios, Beatriz Paredes, Marcela Guerra, Rosanety Barrios, José Luis Luege, Damián Zepeda, Enrique de la Madrid e Ildefonso Guajardo.
Indicó que, para evitar “riesgos en la democracia”, buscaría crear acuerdos con todas las bancadas del Congreso de la Unión, a fin de impulsar reformas por consenso e incluir a la sociedad civil en la selección de los integrantes de organismos autónomos.
“Haber puesto a una Lenia Batres, por ejemplo, con todo respeto. Una mujer que no tenía conocimiento técnico, más allá de la ideología, que lo puedo entender, que todos los presidentes han tenido la tentación, creo que sí estamos obligados a poner gente que tenga un rigor técnico. En ese sentido, yo propongo algo adicional. Yo quisiera quitarme como presidenta esa posibilidad de poner a tus cuates o a tus cuotas”, afirmó.
Gálvez se pronunció por una transición energética en la que, eventualmente, dijo, se debe seguir el ejemplo mundial y “cerrar todas las refinerías”, acción que “asumo y me queda claro”.
“Sí soy de la idea de que hay que cerrar refinerías. Lo sostengo, perdemos 800 mil millones de pesos. No me tiembla la mano”, afirmó.