Los decomisos que ha hecho la Guardia Nacional (GN) en los últimos cuatro años evidencian que el crimen organizado utiliza armas de más alto poder, más sofisticadas y que, en su mayoría, son de uso exclusivo del Ejército.
Especialistas en seguridad consideran que la forma de obtener las armas es por el mercado negro o a través de una fuga en las Fuerzas Armadas. Del 1 de enero de 2020 al 20 de enero de 2024 elementos de la GN han incautado a células delictivas 2 mil 381 armas de fuego.
De éstas, mil 82 son del uso exclusivo del Ejército: fusiles de asalto, mil 15; ametralladoras, 21; subametralladoras, 18; fusiles antimaterial Barrett, 17; subfusiles, seis; metralletas Uzi, cuatro y una ametralladora Minimi.
Los estados con el mayor número de incautaciones de armamento sofisticado se encuentra Sonora, Michoacán, Guanajuato, Jalisco y Chihuahua entre otros. Las estadísticas reflejan que a nivel nacional se incautaron en total 2 mil 381 armas, mil 82 sofisticadas y mil 299 convencionales.