Dentro de la reestructuración del Centro Histórico, no solo es conseguir las calles limpias y seguras para los ciudadanos, sino también lograr una disminución en la contaminación auditiva, lo que llamamos guerra de bocinas, situación que ya está fuera de control entre los locatarios, comentó Daniela González Lara, coordinadora de Asesores del municipio.
Por su parte, Yesenia Anaya Retana, directora de Ecología manifestó que realizaron una campaña de concientización sobre las afectaciones que genera el ruido hacia los ciudadanos, especialmente en esta zona, donde grupos musicales, locatarios y artistas urbanos hacen sus presentaciones y se satura el ambiente.
Cabe destacar que, las sanciones a quienes omitan las recomendaciones van desde los 10 a 20 UMAS, equivalente aproximadamente a los $1,800 pesos.