Después de más de un año y medio casi sin turistas, Israel reabrió este lunes sus fronteras a los viajeros vacunados, luego de un descenso en las contaminaciones y de una campaña nacional paralela de vacunación con las dosis de refuerzo.
En la Ciudad Vieja de Jerusalén, encrucijada de monoteísmos donde se concentran el Santo sepulcro, el Muro de las lamentaciones y la Explanada de las mezquitas, los comerciantes esperan con impaciencia el regreso de los clientes.
Es el caso de Rami Razouk, un vendedor de souvenirs que sonríe tras vender, por primera vez desde el inicio de la pandemia en Israel, postales y camisetas a los turistas extranjeros.