En una decisión que generó fuertes críticas de organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes, la administración de Donald Trump emitió una orden para detener los servicios legales financiados por el gobierno que asisten a niños migrantes no acompañados en los Estados Unidos.Según reportó se reporto, la medida afecta directamente a miles de menores que cruzaron la frontera sur sin la compañía de sus padres o tutores legales, dejándolos en una situación de vulnerabilidad frente a un sistema migratorio complejo y difícil de navegar.
La orden, enviada por el Departamento del Interior al Acacia Center for Justice, una organización sin fines de lucro que coordina servicios legales para aproximadamente 26.000 niños migrantes, instruye a los proveedores de estos servicios a cesar inmediatamente sus actividades.Este cambio abrupto también impacta a otras organizaciones que dependen de contratos federales para ofrecer orientación legal y representación a menores en custodia del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), que supervisa el cuidado de estos niños a través de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR).
Impacto en los derechos de los niños migrantes
De acuerdo con Shaina Aber, directora ejecutiva del Acacia Center for Justice, la suspensión de estos servicios compromete gravemente los derechos de los menores. Aber señaló que los niños migrantes, muchos de los cuales han sufrido traumas severos, ahora enfrentan el riesgo de ser explotados o de caer en situaciones de abuso.“La decisión de suspender este programa socava el debido proceso, afecta desproporcionadamente a los niños más vulnerables y los expone a mayores riesgos”, afirmó Aber en un comunicado.
Por su parte, Roxana Avila-Cimpeanu, subdirectora del Florence Immigrant & Refugee Rights Project, una organización que ofrece presentaciones sobre derechos y otros servicios legales a menores en custodia gubernamental, calificó la medida como un ataque sin precedentes contra los niños migrantes.
“Sin los servicios que proporcionamos, los niños, independientemente de su edad, tendrán que representarse a sí mismos en los tribunales de inmigración. Esto es inaceptable”, declaró Avila-Cimpeanu.Un sistema migratorio complejo y desprotegido
El sistema migratorio de los Estados Unidos es notoriamente complicado, y los menores no acompañados enfrentan desafíos significativos al intentar navegarlo sin representación legal. Según CBS News, los servicios legales financiados por el gobierno han sido esenciales para garantizar que los niños migrantes comprendan sus derechos y puedan acceder a beneficios legales, como el asilo o visas especiales para jóvenes que han sido víctimas de abuso, negligencia o abandono.
Sin embargo, la suspensión de este apoyo podría obligar a las organizaciones a depender de sus propios recursos para continuar representando a los menores en los tribunales de inmigración. Aber advirtió que esta situación no es sostenible a largo plazo, ya que los niños migrantes generalmente no tienen los medios económicos para pagar abogados.
“Los derechos de debido proceso de los niños alcanzarán un nuevo mínimo”, expresó Aber.
Reacciones de organizaciones y expertos
La decisión del gobierno de Trump ha sido ampliamente condenada por organizaciones de derechos humanos y grupos legales en todo el país. Lindsay Toczylowski, presidenta del Immigrant Defenders Law Center, con sede en California, acusó a la administración de abandonar a los niños migrantes por motivos políticos. “Están dejando a los niños a su suerte frente a un sistema de inmigración extremadamente complejo”, afirmó la directiva.
Otras organizaciones afectadas por la medida incluyen el Estrella del Paso, con sede en Texas, y el National Immigrant Justice Center, con sede en Illinois. Estas entidades han advertido que la falta de representación legal aumenta significativamente las probabilidades de que los menores sean deportados, incluso si tienen casos válidos para permanecer en el país.
Contexto de la política migratoria de Trump
La suspensión de los servicios legales para niños migrantes no acompañados es parte de una serie de medidas adoptadas por la administración de Trump para reducir los recursos destinados a los inmigrantes.
Según poco después de asumir la presidencia, Trump ordenó al Departamento de Justicia que detuviera programas similares destinados a apoyar a inmigrantes en detención. Aunque esa orden fue posteriormente revocada, la actual decisión refleja un patrón de recortes en programas que la administración considera innecesarios o contrarios a sus objetivos políticos.
Además, la administración ha implementado cambios significativos en las políticas relacionadas con los menores migrantes. La semana pasada, la ORR endureció los requisitos para los patrocinadores que buscan acoger a niños migrantes, exigiendo que todos los adultos en los hogares de los patrocinadores proporcionen huellas dactilares para verificaciones de antecedentes.
Según CBS News, esta medida desató preocupación entre los defensores de los derechos de los migrantes, quienes temen que disuada a familiares indocumentados de ofrecerse como patrocinadores, dejando a más niños en custodia gubernamental.
Preocupaciones sobre explotación y tráfico infantil
Los críticos de la medida señalaron que la falta de representación legal aumenta el riesgo de que los menores sean víctimas de explotación, incluido el trabajo infantil y el tráfico humano.
Neha Desai, abogada del National Center for Youth Law, calificó la decisión como imprudente y contraria a los objetivos declarados por la administración de proteger a los niños migrantes. “Los niños no acompañados que no tienen representación son mucho más propensos a terminar en situaciones de explotación”, advirtió la defensora legal.