La directora ejecutiva de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDC), Ghada Waly, destacó este miércoles la creciente violencia y expansión de las pandillas en Haití, que continúan extendiendo su control sobre territorios estratégicos y lideran enfrentamientos mortales entre ellas, contra la población y la policía.
Denunció que están reclutando niños a través de las redes sociales y “al parecer le ofrecen pagos de hasta 200 dólares” aprovechando el hambre, la falta de educación y de supervisión de los padres.
Waly presentó un informe sobre la situación de Haití ante el Consejo de Seguridad de la ONU y en su intervención señaló que las pandillas han intensificado sus métodos, recurriendo a tácticas cada vez más brutales.
En su informe, hizo referencia a masacres de gran escala, como la perpetrada por la pandilla Gran Grif en octubre, que dejó 115 muertos en el departamento de Artibonite, y la ejecución de más de 200 personas en diciembre en el barrio de Wharf Jérémie.
Subrayó que la expansión de las pandillas no parece ser fruto de una violencia arbitraria, sino de una estrategia calculada para asegurar el control de recursos clave y establecer alianzas con las élites políticas y económicas del país. Actualmente, las pandillas controlan alrededor del 85 % de la capital, Puerto Príncipe, con gran parte del territorio dividido entre diferentes coaliciones criminales.
Reclutamiento de niños por las pandillas
Waly precisó que cada vez más, los ciudadanos haitianos son contrabandeados a través de rutas peligrosas por mar hacia países como la República Dominicana, las Bahamas, Jamaica y las Islas Turcas y Caicos, con la intención de llegar a los Estados Unidos y Canadá.
“Haití también está siendo testigo de un aumento alarmante de la trata de personas, y en particular de la trata de niños por parte de pandillas”, dijo.