Doce Congresos estatales (Ciudad de México, Tabasco, Zacatecas, Tlaxcala, Quintana Roo, Campeche, Baja California, Durango, Sinaloa, Oaxaca, Yucatán y Colima) aprobaron ayer la reforma constitucional que deja a la Guardia Nacional bajo la adscripción de la Secretaría de la Defensa Nacional, así como la que reconoce los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos.
Se requiere al menos el aval de 17 legislaturas locales para que las enmiendas sea declaradas constitucionales y publicadas en el Diario Oficial de la Federación.
El Congreso del estado de Tabasco se convirtió en el primero en dar el visto bueno a la minuta con proyecto de decreto sobre el traspaso de la Guardia Nacional a la Sedena; 27 diputados locales votaron a favor y ocho en contra.
El Congreso de la Ciudad de México tuvo que modificar su agenda para convocar en dos ocasiones al pleno del Constituyente permanente para aprobar tanto el dictamen de los derechos de pueblos indígenas, como el de la Guardia Nacional.