Francisco Labastida Ochoa, excandidato presidencial del PRI, señaló que le tienen sin cuidado las amenazas de Alejandro Moreno de expulsarlo del partido, ya que próximamente presentará su renuncia a la militancia en el tricolor, pero advirtió que el líder priista debe ser investigado por corrupción.
Minimizó los señalamientos en su contra por el caso Pemexgate, en el que recursos de Petróleos Mexicanos fueron desviados a la campaña electoral del PRI en el año 2000.
Al preguntarle si hay una cacería de brujas de Alito Moreno contra sus opositores, respondió que se trata “sobre todo de una tarea de distracción para encontrar un asunto del cual hablar que no sea su fracaso, manifestando que ha sido el peor presidente que el partido haya tenido rotundo fracaso.