El canciller peruano, Javier González-Olaechea, no descarta que la imposición de visas a peruanos para ingresar a México, anunciada el sábado y que su país aplicará también en forma recíproca, responda a las tensiones diplomáticas entre ambas naciones.
“No lo descarto, (pero) no estoy en condiciones de afirmarlo”, declaró el ministro de Relaciones Exteriores en declaraciones a la emisora RPP.
Las relaciones diplomáticas entre ambos países se mantienen a nivel de encargados de negocios tras el rechazo abierto del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a la presidenta peruana, Dina Boluarte, a la que incluso calificó de “usurpadora”, tras haber asumido la jefatura de Estado luego del fallido autogolpe de Estado de Pedro Castillo, del 7 de diciembre de 2022.
Además del retiro de ambos embajadores, este enfrentamiento generó que López Obrador se negara a entregar en 2023 a Perú la presidencia ‘pro tempore’ de la Alianza del Pacífico, en una situación que solo se logró resolver tras la intermediación de Chile.
González-Olaechea agregó que la “decisión unilateral” de México no los tomó “por sorpresa”.
Sin embargo, expresó que han ido “calibrando las repercusiones internas porque evidentemente afecta en primer lugar a la propia Alianza del Pacífico, que forma parte el Perú junto con México, Colombia y Chile, y que claramente establece como principio la circulación de personas y de bienes”.
Con respecto a la decisión de Perú de también pedir el visado para los ciudadanos mexicanos, el ministro explicó que “se ha tomado a raíz, precisamente, de la medida impuesta por México” por el principio de reciprocidad.