Rafael Caro Quintero, conocido como el “Narco de Narcos” detenido en 2022 por la Marina Armada, fue trasladado el pasado miércoles del Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) Número 1 “Altiplano” al hospital “Adolfo López Mateos”, en Toluca, Estado de México, esto para una cirugía médica programada.
De acuerdo con medios de comunicación, el capo padece de una hipertrofia de próstata grado IV que le fue diagnosticada por médicos especializados, por lo que fue sometido esta mañana a una cirugía. Quintero se mantiene al interior del hospital custodiado por un fuerte dispositivo de seguridad de la Guardia Nacional.
En julio de este año, la llamada prisión del Altiplano ubicado en Almoloya de Juárez, Edomex, inició los trámites para que el capo sinaloense recibiera la atención médica requerida, luego de que se le detectó un problema en la próstata que padece desde hace 20 años.
La Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) espera que Rafael Caro Quintero sea extraditado desde México a principios de 2024, esto para que pueda enfrentar acusaciones en varias Cortes del país, además del cargo por el asesinato del agente Enrique “Kiki” Camarena.
El Departamento de Estado de el país norteamericano ha mostrado mucha urgencia en el proceso de extradición de Caro Quintero, para lo que ha presentado no solo la petición para juzgarlo por el asesinato del agente de la DEA, “Kiki” Camarena en 1985, sino también por acusaciones de otras tres Cortes.
De acuerdo con información previamente revelada, el pasado mes de marzo, la Embajada de EUA formalizó su petición de extradición por 19 cargos en cuatro Cortes distintas: las de California, Nueva York, del Sur de Texas y la Corte de Hidalgo en Texas.
