El presidente Andrés Manuel López Obrador detalló que trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), escoltados por personal militar, entraron a diversos poblados de Chiapas para restablecer la energía eléctrica cortada por grupos criminales.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, López Obrador reveló un informe sobre la situación en Frontera Comalapa, donde se retiraron bloqueos que llevaron a cabo los grupos delincuenciales.
“Hoy nos reportaron que ya están allá los elementos de la Guardia Nacional, que ya están trabajando en la reinstalación de energía eléctrica, ¿Quieren conocer el reporte? El de la Sedena de hoy, sí, se quitaron todos (los bloqueos)”, dijo en el Salón Tesorería.
“Uno, entrevista con pobladores (de comunidades), informando el motivo de la presencia militar. Dos, se está restableciendo la energía eléctrica (mediante traslados por helicóptero). Tres, personal militar, Guardia Nacional y Policía estatal brindó protección a personal de la CFE. Cuatro. Se restableció el servicio de energía eléctrica. Cinco, se retiraron tres bloqueos en Frontera Comalapa”, puntualizó.
La controversia comenzó el viernes, cuando se viralizó un video en el que pobladores de Chiapas, estado de la frontera sur, se reunieron en la Carretera Panamericana para aplaudir a un grupo identificado con el Cártel de Sinaloa por liberar los caminos del municipio Frontera Comalapa que el grupo criminal había bloqueado.
Tras los hechos, el Gobierno de Guatemala confirmó este lunes el envío de 2.000 miliares a su frontera con México, que a su vez mandó a la zona 800 elementos de la Guardia Nacional, del Ejército y de la policía estatal.
Los hechos reflejan que la violencia del crimen organizado se ha recrudecido este año en Chiapas, donde los pueblos originarios han advertido de una “guerra civil” en medio de la disputa del Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), dos de los más poderosos de México.
Las imágenes de pobladores que defienden a los cárteles han despertado preocupación sobre la base social del narcotráfico, pero el presidente López Obrador ha desestimado dicho apoyo.