China corre el riesgo de un “tsunami” de infecciones por COVID-19, que resulte en 1.6 millones de muertes si el gobierno abandona su política restrictiva contra COVID de larga data y permite que la variante ómicron altamente infecciosa se propague sin control, según investigadores de la Universidad Fudan de Shanghái.
El estudio, publicado en la revista Nature Medicine, encontró que el nivel de inmunidad inducido por la campaña de vacunación de marzo de China sería “insuficiente” para prevenir una ola de contagios que inundaría la capacidad de cuidados intensivos, dadas las bajas tasas de vacunación entre los ancianos y la capacidad del virus para evadir la inmunidad de las inyecciones existentes.
Los hallazgos agregan peso a la continua insistencia del gobierno en mantener el enfoque de tolerancia cero hacia el COVID, que ha mantenido a raya al virus durante la mayor parte de la pandemia.
Sin restricciones como las campañas de pruebas masivas del país y los estrictos cierres, la propagación de ómicron podría provocar 112.2 millones de casos sintomáticos, 5.1 millones de ingresos hospitalarios y 1.6 millones de muertes, y la ola principal se produciría entre mayo y julio, concluyó el estudio.
Sin embargo, aumentan las preocupaciones sobre los costos sociales y financieros de la campaña COVID Zero, que ha requerido restricciones cada vez más duras para combatir el virus más transmisible. En los cierres de China a las personas se les negó el acceso a la atención médica y lucharon por acceder a alimentos frescos, mientras que las instalaciones de fabricación, las cadenas de suministro y otros lugares de trabajo sufrieron interrupciones.
La investigación, que refleja el modelo anterior de la Universidad de Pekín, se produce cuando el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, pidió a China que reconsidere su estrategia, diciendo que el enfoque ya no tiene sentido a medida que la variante ómicron se propaga y la economía del país sufre.
“No creemos que sea sostenible, considerando el comportamiento del virus ahora y lo que anticipamos en el futuro”, dijo Tedros en una sesión informativa el martes, y agregó que “un cambio sería muy importante”.