En medio de la revisión del programa de regularización vehicular, importadores se mantienen preocupados por la continuidad de las reglas de operación, por lo que solicitaron a legisladores federales que mantengan abierta la frontera para proceder al registro de millones de unidades a nivel nacional.
El coordinador nacional de Identifi-K-Te César Raúl Villalba Navarrete informó que el cierre de la frontera a la importación de vehículos solo deriva en mayor corrupción, pues hay ciudadanos que llevan hasta 12 años sin pagar impuestos y no han regularizado su patrimonio.
Indicó que son más de 4 millones de unidades que no podrán ser registrados bajo el esquema actual.
Agregó que dentro las peticiones se busca la reducción de aranceles y una vez liberados los trámites importación, se podrá recuperar los recursos en las entidades donde se registren los autos.