El operativo de seguridad incluye perros rastreadores, así como aviones caza, helicópteros militares y drones para controlar el espacio aéreo
La ciudad de Roma, que albergará este fin de semana la cumbre del G20, desplegó un potente operativo de seguridad con más de 5 mil policías que patrullarán las calles para evitar manifestaciones violentas como las que se produjeron hace 15 días contra la obligación del pasaporte sanitario y que derivaron en graves disturbios y en el asalto a la sede del principal sindicato italiano.
La zona del EUR, un barrio periférico que mandó construir el dictador Benito Mussolini en los años 30, acogerá la cumbre y ha sido declarada zona roja de máxima alerta. Todo el área permanecerá completamente cerrada al tráfico y se ha dispuesto el cierre de los colegios y las empresas allí radicadas desde este viernes y hasta el domingo.
El operativo de seguridad incluye perros rastreadores, así como aviones caza, helicópteros militares y drones para controlar el espacio aéreo. Están previstas diversas manifestaciones de los activistas contra la emergencia climática de ‘Fridays For Future’, así como de personas que han perdido su trabajo y de varias ONG, que protestarán contra la dificultad de los países con menos recursos económicos para acceder a las vacunas contra la Covid-19.