Debido al incremento en la demanda de servicios de tatuaje y del llamado piercing, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos hizo el llamado a la población a que registre quejas por discriminación, pues es probable que esa práctica se lleve en centros laborales o en la dinámica comunitaria.
El primer visitador Cesar Rene Díaz Gutiérrez informó que durante el año pasado no se registraron quejas al respecto, lo cual es posible que sea por la emergencia de salud, además el hecho de que no haya reportes o atenciones en ese sentido, no quiere decir que no exista la discriminación, ya que finalmente la imagen corporal ocasiona diversas reacciones entre los ciudadanos.
Indicó que el uso de tatuajes o de aretes en diversas partes del cuerpo solo es el reflejo de la personalidad y refiere a condiciones que van directamente ligadas a la conducta, pues durante mucho tiempo se consideró que esta práctica solo era propia de actitudes delictivas.