El doctor Arturo Valenzuela, director médico en la Zona Norte, informó que los brotes de COVID-19 en el albergue federal para migrantes Leona Vicario está controlado, de las 3 familias sospechosas sólo una dio positivo al virus, sus 3 integrantes están aislados y estables.
En cuanto al brote en el Cereso número 3, se confirmó que de los 10 presos que dieron positivo al virus sólo 4 necesitaron atención médica y ya están evolucionando de manera favorable, el resto no ha presentado complicaciones.
Valenzuela agradeció a los trabajadores de la salud de ambos espacios, ya que, señaló, han dado un trato profesional y digno a los contagiados, y han abordado la situación de tal manera que el virus no se ha extendido en estos lugares.