Con la exigencia de que una sola persona sea la que pueda entrar a las tiendas para las compras de los víveres básicos, las grandes cadenas de autoservicio de la localidad finalmente optaron por negar la entrada a niños y adultos mayores, mientras que los empleados de esas negociaciones incumplen con la dotación de gel antibacterial y con la desinfección de superficies y carritos.
Lo anterior, luego de que en la sucursal Centro de una tienda de autoservicio ubicada en Avenida Mariscal y Vicente Guerrero, se negó la entrada a una persona que usa muletas debido a que se fracturó la pierna recientemente y que su pequeño hijo de 12 años tendría que apoyarlo con las compras.
Ante la negativa del personal de seguridad de la tienda, la gerente de esa sucursal salió para confirmar la situación y no se permitió que el hombre fuera apoyado por su hijo.
Cabe destacar que la encargada de la tienda no utilizaba correctamente el cubre bocas.
De la misma manera, se ha encontrado en varias tiendas la negativa de acceso a más de una persona y en otras, se destinó un horario especial para la venta a adultos mayores.
Aunque se registra actividad constante en los supermercados, la comunidad atiende con asombro las disposiciones y consideraron que se trata de medias que no contemplan las verdaderas necesidades de los ciudadanos, sobre todo por el encarecimiento de varios productos de primera necesidad.