La tarde del jueves, un grupo de habitantes de la zona de Samalayuca se manifestó en las instalaciones del Poder Judicial de la Federación para solicitar un amparo contra la operación de la mina a cielo abierto, pues atenta contra la ecología debido a que el sistema tiene que utilizar grandes cantidades de agua que serían tomadas del Bolsón del Hueco.
La vocera de los manifestantes Lidia Granados argumentó que esta mina no puede operar en la zona ya que alterara el ecosistema del lugar el cual es reconocido por su diversidad además que dejaría sin el suministro de agua suficiente.
En cuanto a la generación de cientos de empleos, la líder de los manifestantes detalló que se trata de vacantes sin seguridad social, ya que esta actividad es de las más peligrosas en todo el mundo debido a las condiciones en las que se desarrolla, por lo que han visto casos de personas con problemas pulmonares y de la piel debido a la exposición al subsuelo.
Mencionó que seguirán realizando este tipo de actividades para evitar que se haga esta inversión y se altere el ecosistema de la zona, por lo que esperarán la resolución de los tribunales para continuar estos esfuerzos.
Fernando Luévanos