A un año de que se registraron las primeras caravanas de migrantes Centroamericanos hacia el norte del país, el gobierno federal no ha manifestado una postura clara sobre el tema y en cambio ha realizado actividades que vulneran los derechos humanos de cada persona, además de ataques que han derivado en violencia, manifestó el director de La Casa del Migrante Javier Calvillo.
El sacerdote mencionó que también se endureció la política migratoria en Estados Unidos, gobierno que no ha cumplido con los acuerdos sobre la celeridad de los trámites de asilo político, lo cual se puede ver ahora con los connacionales, que una vez repatriados, no han avanzado en esa gestión.
Aun con toda la serie de acciones emanadas de los gobiernos, son los organismos civiles y religiosos los que realmente siguen combatiendo el problema; ya que en ninguna otra instancia se logra la capacidad de aportarles techo y comida, situación que sigue siendo un gasto considerable para estas asociaciones.
El presbítero aseguró que el problema solamente se ataca de forma emergente, para lo cual se requiere que el gobierno mexicano establezca una postura definitiva para contar con acciones contundentes.
