El Servicio de Administración Tributaria (SAT), encabezado por Antonio Martínez Dagnino, presentó este jueves un paquete de medidas orientadas a combatir la evasión fiscal y cerrar el paso a las empresas falsas. Las nuevas acciones buscan establecer un “piso parejo” en el cumplimiento de las obligaciones fiscales, con especial énfasis en fortalecer la recaudación sin afectar a los contribuyentes cumplidos.
Durante la conferencia matutina presidida por Claudia Sheinbaum, el titular del SAT detalló que las modificaciones buscan prevenir prácticas fraudulentas sin que los contribuyentes legítimos se vean perjudicados. Una de las principales reformas involucra el proceso de inscripción al Registro Federal de Contribuyentes (RFC) y la emisión de la firma electrónica. Anteriormente, ambos trámites se otorgaban de manera simultánea, lo que facilitaba que las empresas fraudulentas comenzaran a operar de forma inmediata.
“Ahora, las empresas deberán demostrar que el domicilio registrado es real. No podrán utilizar direcciones de socios o testaferros para simular operaciones que permitan evadir impuestos”, explicó Martínez Dagnino.
Con esta medida, el SAT busca aumentar el control sobre la facturación y la autenticidad de los contribuyentes, previniendo que las denominadas “factureras” se infiltren en el sistema tributario. Además, subrayó que el proyecto de reforma contra la venta de facturas falsas está actualmente en discusión en el Congreso y se apoya en la reforma al artículo 19 constitucional, que tipifica la venta de facturas falsas como un delito grave.
Martínez Dagnino también destacó que el procedimiento de inscripción será ahora más ágil y no tomará más de 24 días. En este tiempo, los contribuyentes podrán recibir el alta de su RFC, pero si se detectan irregularidades, el sello digital se cancelará de inmediato, respetando siempre el derecho de audiencia de los contribuyentes.
Un aspecto relevante de las nuevas medidas es que aquellos socios, accionistas o representantes legales de empresas involucradas en la venta de facturas falsas no podrán registrar nuevas empresas en el futuro. Además, aquellos que compren facturas falsas deberán corregir su situación fiscal, de lo contrario, también se les cancelará el sello digital correspondiente.
“El objetivo de estas reformas es asegurar un sistema fiscal más justo, donde todos los contribuyentes estén en igualdad de condiciones. Buscamos que todos contribuyan de manera equitativa”, afirmó Martínez Dagnino.
Con estas medidas, el SAT refuerza su estrategia para erradicar el uso de empresas fachada y fomentar una cultura fiscal más transparente y equitativa en México.
