En un gesto histórico de unidad religiosa, el Papa León XIV y el Rey Carlos III de Gran Bretaña se reunieron este jueves en la Capilla Sixtina del Vaticano para realizar una oración conjunta, marcando un acontecimiento sin precedentes en casi 500 años. Este acto se convierte en el primero de su tipo desde que el monarca Enrique VIII de Inglaterra rompiera en 1534 con la autoridad de la Iglesia Católica, dando inicio a la Reforma y separando a la Iglesia de Inglaterra de Roma.
La ceremonia, que combinó cantos en latín e inglés, incluyó una oración universal pronunciada por ambos líderes religiosos. Este evento simbolizó un importante paso hacia la fraternidad entre las dos grandes tradiciones cristianas: la católica y la anglicana.
El Rey Carlos III, quien también ostenta el título de Gobernador Supremo de la Iglesia de Inglaterra, se encuentra en una visita de Estado al Vaticano para conmemorar los vínculos históricos y espirituales entre ambas comunidades religiosas. Aunque el rey ya había tenido encuentros previos con los papas Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco, este es el primer culto religioso conjunto en el que participa.
La ceremonia de este jueves, que se llevó a cabo en el corazón del Vaticano, se presenta como un simbolismo de acercamiento, en un momento en el que tanto la Iglesia Católica como la Anglicana buscan fortalecer sus lazos de cooperación y diálogo interreligioso, después de siglos de distanciamiento.
