La diputada por Morena, Rosana Díaz, calificó como “reprobables” las declaraciones del Fiscal General del Estado, César Jáuregui, quien afirmó que la seguridad en Chihuahua “está bajo control”, a pesar de que la entidad continúa siendo la más violenta del país, con un alarmante aumento en los homicidios dolosos. Tan solo el día de ayer, se registraron 11 asesinatos.
“Es indignante que, mientras las familias chihuahuenses viven con miedo, las autoridades responsables de garantizar la seguridad se atrevan a decir que todo está bien. Esto refleja una grave falta de sensibilidad y una desconexión con la realidad que vivimos en las calles”, comentó Díaz Reyes.
La legisladora también lamentó que, en lugar de centrarse en atender la crisis de violencia que afecta al estado, funcionarios clave en materia de seguridad, como César Komaba y Ulises Pacheco, estén involucrados en actividades partidistas dentro del PAN, desempeñándose como dirigentes municipales en Chihuahua y Ciudad Juárez.
“En un momento crítico, cuando se requiere unidad y coordinación entre los tres niveles de gobierno, estos servidores públicos utilizan su posición para fines políticos. Esto es grave, peligroso y un completo desprecio por los ciudadanos de Chihuahua”, advirtió Díaz.
Díaz subrayó que desde Morena se ha insistido en que la seguridad no debe politizarse, y que la prioridad debe ser la protección de la ciudadanía, por encima de cualquier interés electoral.
“Exigimos responsabilidad, sensibilidad y resultados. Los cargos públicos deben ser para servir al pueblo, no para hacer campaña. Quien tenga una función en seguridad debe dedicarse exclusivamente a garantizar la paz, no a promover su partido”, concluyó la diputada.
Este reclamo llega en medio de una creciente preocupación por la ola de violencia que enfrenta el estado y la falta de respuestas efectivas de las autoridades locales.
