La Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha reportado anomalías que superan los 6,969 millones de pesos en la Cuenta Pública 2024, correspondiente al último año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Según el informe consolidado de la fiscalización, en su primera y segunda entrega, la ASF ha logrado recuperar aproximadamente 1,146 millones de pesos, quedando aún sin esclarecer el destino de cerca de 5,823.5 millones de pesos.
En junio, la ASF había identificado posibles irregularidades por un monto de 770 millones 161,700 pesos en su primera revisión, cifra que aumentó en la segunda revisión a 6,199 millones 762,300 pesos. Esto refleja un incremento significativo en las observaciones realizadas.
Entre los principales hallazgos, el gasto federalizado destaca como el área con mayores posibles desvíos, con un monto de 5,020 millones de pesos aún sin justificar. A continuación, se encuentra el gobierno federal, que no ha podido comprobar el uso de 282.4 millones de pesos. En cuanto al desarrollo económico, se mantienen pendientes 263.1 millones de pesos, mientras que en el sector de desarrollo social se han identificado irregularidades por más de 256.9 millones de pesos.
David Colmenares Páramo, titular de la ASF, presentó los resultados de la segunda entrega de los informes de fiscalización ante la Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados. En esta segunda revisión se realizaron 546 auditorías, de las cuales 5,161 millones de pesos aún no han sido aclarados. De esta cifra, el 89% corresponde a gastos realizados por estados y municipios, donde se detectaron presuntas irregularidades por más de 4,600 millones de pesos, especialmente en áreas como servicios de salud, financiamiento de obras en zonas marginadas, pago de nóminas educativas, deuda local y saneamiento financiero.
En contraste, las entidades federativas de Ciudad de México, Querétaro, Quintana Roo, Sinaloa y Zacatecas destacaron por no presentar montos por aclarar, lo que fue señalado positivamente por el auditor.
Además, Colmenares Páramo subrayó las irregularidades encontradas en el Poder Judicial, donde no se ha podido identificar el destino de más de 272 millones de pesos. Aunque aún falta por entregar un tercer informe, destacó que las entidades fiscalizadas tienen la oportunidad de aclarar las observaciones vinculadas al ejercicio de los recursos públicos.
Por último, el titular de la ASF enfatizó el uso de herramientas tecnológicas avanzadas para reforzar la fiscalización. En particular, mencionó el desarrollo de una herramienta de Inteligencia Artificial, que será presentada oficialmente en noviembre. Esta tecnología, diseñada para procesar y analizar información automáticamente, permitirá a los auditores realizar tareas más complejas con mayor eficiencia, reduciendo los tiempos de procesamiento y análisis.
