La Secretaría de Hacienda y Crédito Público de México reveló en su informe de fin de mayo que la deuda pública alcanzó un saldo histórico de 17 billones 674 mil millones de pesos, lo que representa un 49.2% del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Esta cifra, aunque elevada, se considera baja en comparación con otras economías emergentes y países latinoamericanos. De hecho, la Secretaria de Hacienda subraya que la proporción es inferior a la registrada al cierre de 2024, que era del 51.3% del PIB.
En comparación con el mismo periodo del año anterior, el saldo de la deuda creció en más de 2 billones de pesos, reflejando un aumento de 8.6% en el saldo de los requerimientos financieros del sector público.
Esta alza ha sido impulsada por varios factores, entre ellos la depreciación del peso frente al dólar, que en algunos meses ha complicado la capacidad de pago de México. Sin embargo, el tipo de cambio favorable (por debajo de los 20 pesos por dólar) ayudó a atenuar este impacto, reduciendo la deuda externa en términos reales en un 0.1%.
De la deuda total, 83.4% corresponde a deuda interna, y dentro de esa, una gran parte (79.9%) está contratada a tasas fijas y a largo plazo.